Proponen que solo los clientes manipulen las tarjetas de crédito y débito al pagar
Será este martes cuando, en horas de la tarde, la Cámara de Diputados se reúna en una nueva sesión ordinaria, de la cual ya dieron a conocer el acta de labor parlamentaria con los proyectos que concentrará la atención y el debate de sus miembros.
Entre los asuntos de dicha acta sobresale el proyecto que propone prohibir que en comercios o locales, cuando uno vaya a pagar con tarjeta de crédito o débito, ésta sea llevada por los vendedores o la gente que atienda al usuario y/u consumidor, sino que las operatorias de cobro las realicen en el lugar y con la manipulación de los plásticos únicamente por los titulares.
Esta es una iniciativa de la diputada Gladys Paredes quien, en los fundamentos, recalca que el objetivo del proyecto es regular aquellas operaciones de compra que los usuarios realizan con tarjetas de crédito o de débito, a los efectos que las mismas sean más seguras y confiables.
Asimismo se recalca en que es una práctica habitual que los comerciantes pidan a los compradores o consumidores sus plásticos para realizar los cobros, manipulándolos libremente y sin la vigilancia de los titulares. “La modalidad implica la posibilidad de que se obtengan los datos de la tarjeta rápidamente, los que después pueden ser utilizados para compras u operaciones comerciales electrónicos que no requieren más que los datos que figuran en la tarjeta, pero que no fueron realizados por el titular”, asevera como peligro latente.
Es por eso y, a fin de evitar estafas, robo de datos y otros perjuicios, es que se plantea que las tarjetas solo deban ser manipuladas exclusivamente por el usuario habilitado cuyo nombre figura en el plástico, mientras que los comerciantes deberán acondicionar sus dispositivos de cobro electrónico de modo de facilitar las operaciones garantizando la manipulación de la tarjeta correspondiente, de forma directa y exclusiva, por el propio usuario.
“No está de más recordar que en el último tiempo, se produjo un incremento exponencial de las operaciones comerciales digitales, y conjuntamente proliferaron las estafas cometidas mediante la sustracción de los datos de los usuarios de pagos digitales, requeridos para las transacciones electrónicas”, se advierte en el contenido del proyecto a tratarse.