La frontera norte de Salta volvió a encender las alarmas. En diálogo exclusivo con el programa "Somos La Mañana", el interventor de Aguas Blancas, Adrián Zigarán, denunció la existencia de una "aduana paralela" que funcionaría en la finca Carina, ubicada a tan solo dos kilómetros del cerco perimetral oficial, y reveló que este martes por la madrugada Gendarmería Nacional bloqueó el predio, donde se reportaron disparos entre las 5 y las 6 de la mañana.

Según Zigarán, en el operativo desplegado por Gendarmería habría participado un importante contingente con más de 40 efectivos, mientras que en el lugar había unas 200 camionetas de particulares. El funcionario denunció que en esa finca, propiedad de una ciudadana boliviana identificada como Carina Salazar, se cobra dinero en efectivo para permitir el paso de vehículos y mercadería entre Argentina y Bolivia.

"Cobran a los autos 2 mil pesos, a las camionetas 4 mil y a los camiones mucho más. Además, te cobran a la salida según el bulto que llevás", afirmó Zigarán.

El interventor explicó que esta situación nació durante el cierre de fronteras por la pandemia de COVID-19 y que desde entonces el predio operó de manera clandestina y permanente, incluso con un cerco perimetral y control propio. "Este paso ilegal funciona las 24 horas", afirmó.

Zigarán se mostró indignado con la inacción del Gobierno Nacional, al que acusa de permitir el funcionamiento de un paso clandestino por el que "se mueven hasta tres millones de dólares en mercadería" sin ningún tipo de control aduanero.

"¿Cómo puede ser que el Estado permita esto? En Mendoza tenés ocho horas de cola en la frontera, y acá pasan libremente. Hace un mes estoy intentando hablar con Nación para ordenar esto, porque van ga haber problemas", advirtió.

También señaló que, a diferencia de lo que ocurre en Salvador Mazza, donde "los bagayeros y carreros tienen carriles especiales", en Aguas Blancas no existe un sistema que regule ni formalice ese tránsito.

Por último, confirmó que Prefectura Naval ya está apostada en la zona del nuevo alambrado, que fue colocado hace diez días como parte de los esfuerzos por contener el paso irregular, aunque remarcó que el Estado debe intervenir de forma inmediata para evitar un conflicto mayor.