Martín Menem vendió la flota de autos de la Cámara de Diputados de la Nación

El monto recaudado de esta subasta se destinará a la adquisición de bienes de uso, inversiones edilicias, y otros gastos de inversión patrimonial.

En un esfuerzo por promover la austeridad y mejorar la eficiencia del gasto público, la Cámara de Diputados, en colaboración con el Banco Ciudad, ha concretado la venta de una flota de 46 autos oficiales. El monto recaudado de esta subasta se destinará a la adquisición de bienes de uso, inversiones edilicias, y otros gastos de inversión patrimonial del palacio legislativo.

El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, había anunciado en marzo la decisión de subastar las unidades oficiales. A través de un comunicado y un video, se explicó que esta medida está alineada con el compromiso del Gobierno Nacional de promover la austeridad en la política y cuidar el dinero de los argentinos. 

"La casa del pueblo no debe servirse del pueblo", rezaba el eslogan libertario en el video, que mostraba varios de los vehículos estacionados en el subsuelo del Anexo de la Cámara de Diputados.

Esta iniciativa es parte de una serie de medidas implementadas por Martín Menem para responder a los pedidos de austeridad del presidente Javier Milei. Anteriormente, Menem había revertido un incremento del 30% en las dietas de diputados y senadores, autorizado junto con la titular del Senado, Victoria Villarruel. 

Ahora, los legisladores están a la espera de una resolución que otorgue un incremento del 80% en tres cuotas para las dietas de los diputados. Además de la venta de autos, Menem ha impulsado la reducción de compras y la estructura de la Cámara baja, llevando a cabo una auditoría interna sobre los gastos operativos del cuerpo legislativo. 

Esta auditoría ha resultado en la eliminación de 78 cargos jerárquicos y 220 contratos, generando un ahorro anual de $3.500.000.000 (aproximadamente 3,5 millones de dólares).

Otra medida significativa ha sido la reinstauración del control de presentismo mediante registros biométricos, que ha incrementado en un 45% la asistencia de los trabajadores de la Cámara. Esta medida comenzó el 1 de febrero y anuló una normativa de 2017 que eximía del control de presentismo a directores y subdirectores.