El fiscal Ricardo Toranzos, reveló como responsables de la droga a los hermanos, ligados al hallazgo de más de 193 kilos de cocaína en el doble fondo de una camioneta; vehículo que había volcado en la ruta provincial 53, jurisdicción de Embarcación.

El sábado último, una camioneta Mitsubishi color gris fue hallada a la vera de la Ruta Provincial 53, con signos de vuelco ante el daño que evidenciaba el techo de la misma, a la altura del paraje Corral Quemado; a pocos kilómetros de Padre Lozano, punto entre Embarcación e Hickman. El fiscal Toranzos relató que, ante el hallazgo, policía inició actuaciones con intervención de la fiscal de Embarcación; Gabriela Souto; quien ordenó la búsqueda en hospitales del lugar a posibles personas lesionadas en el accidente.

Los dos acusados, Héctor y Damián Pereyra, fueron ligados al hecho debido a una investigación en curso, misma que comenzó el 25 de julio pasado. La auxiliar fiscal Carolina Aráoz Vallejos, del área Casos Complejos, había requerido ante la jueza federal de Garantías N°2, Mariela Giménez, autorización para avanzar con intervenciones telefónicas a integrantes de una organización narcocriminal, identificados a raíz de tareas de campo por hechos similares ocurridos entre Diciembre del 2022 y julio de este año.

Entre esos sospechosos aparecía Héctor Daniel Pereyra, de manera que la investigación llevó a identificar la camioneta volcada y que ya había sido utilizada por los acusados en otras operaciones de tráfico ejecutadas en el periodo mencionado. Toranzos remarcó que el propietario del rodado resultó ser una persona que desde abril pasado se encuentra detenida e imputada por un hecho de narcotráfico. Los allanamientos efectuados a posterior ocurrieron en la casa de los hermanos Pereyra, en Tartagal, en una propiedad en Barranca Colorada (Rivadavia Banda Sur), y en Alto La Sierra (Rivadavia).

Si bien se pudo determinar la propiedad de la camioneta, Toranzos agregó que en el momento era utilizada por un familiar, persona que está siendo buscada, al igual que otras personas que habrían participado del transporte frustrado por el vuelco; según surge de los diálogos mantenidos por los acusados con otros sospechosos en horas posteriores al accidente. Además de la detención de los Pereyra, se secuestraron teléfonos, dinero y otros elementos de interés para el caso, razón por la cual se solicitó al juez autorización para avanzar con los peritajes.

La fiscalía pidió la formalización de la investigación penal, a lo que sumó el requerimiento de prisión preventiva de ambos imputados. Fundó esta última solicitud en los riesgos de fuga y de entorpecimiento procesal, en la gravedad del hecho, en la logística de la operación y en la escala penal prevista, entre otros indicadores. Los imputados, por su parte, se negaron a prestar declaración. En ese estado, el juez avanzó con la resolución de los pedidos del fiscal y aceptó tanto la formalización de la investigación.