El ejecutivo regional del Gran Chaco Boliviano había explicado que los nuevos pasos no revisten carácter internacional.

El presidente del Comité Cívico, Luis Gerardo Peñaranda, declaró a medios del sur boliviano que la medida de fuerza se decidió tras emitir un voto resolutivo para solicitar información tanto al gobierno nacional boliviano como al gobierno regional sobre los puentes en La Cercada y Bañado, ya que se teme que puedan perjudicar los intereses del distrito. El sector bagallero se ubicó sobre la Avenida Tarija (continuación del Puente Internacional), en San José de Pocitos, con el bloqueo; sector que suma alrededor de 1.000 miembros y que desde pandemia Covid-19 sienten tanto el impacto del contrabando en frontera como de las nuevas medidas argentinas en el comercio internacional.

El plazo de 72 horas concedidas la semana pasada a fin de facilitar informes sobre las obras planificadas para construir dos nuevos puentes venció el lunes 18 y sin recibir respuesta, lo que llevó a declarar paro y bloqueo indefinido en las fronteras, comenzando a las 6 de la mañana, hora de Bolivia. Bagalleros temen que los nuevos pasos afecten todavía más al sector, si bien la parte comercial trabajaba con normalidad este miércoles, como tampoco el tránsito peatonal se veía afectado; solo el movimiento de transporte está detenido a uno y otro lado del límite internacional.

Medios pociteños registraban aproximadamente cinco puntos de bloqueo, desde el Distrito 1 hasta el Puente Internacional que une Bolivia con Argentina. Explicando sobre los trabajos proyectados, el gobernador regional del Gran Chaco; José Luis Ábrego; declaraba que forman parte de la mejora de caminos comunales y no constituyen como nuevos pasos fronterizos, como se había afirmado. (ElPaís.bo/Radio Fides)