La primera en hablar fue la autora de la iniciativa, la diputada Ana Laura Córdoba quien consideró: “El objeto de este proyecto de Ley es poder detectar y sancionar los casos de bullying que se dan en las instituciones tanto públicas como privadas. Argentina es uno de los países donde se dan más casos de bullying y ciber bullying, todos los que hemos trabajado en educación hemos sido testigos”.

“Creo que cada niño, joven y adolescente tiene una historia por detrás, yo no creo que sea agresivo porque sí”, continuó antes de agregar: “Debemos tomar medidas serias con aquel alumno o docente que oculta los casos de bullying, no solamente centrarnos en la víctima”.

En el mismo sentido tomó la palabra Santiago Vargas que comentó: “Desde hace un tiempo este problema se ha visibilizado. Me ha tocado convivir con el bullying, vivirlo como padre y el daño que produce en los niños es incalculable”.

“Se me hace difícil pensar cómo se podría garantizar que esta ley otorgue los mecanismos cuando el estado no está, cuando pasa lo que pasa en el departamento San Martín donde tenés un gabinete psicológico para más de 100 escuelas”, consideró en un tono más crítico.

“Esta ley lo que tiene que hacer, no es solamente pelear contra el bullying sino que cada uno de los actores tenga las herramientas necesarias para que sea aplicada”, finalizó para darle lugar a la diputada María Frísoli.

La funcionaria aseguró: “La ley habla de implementar los métodos alternativos para la resolución de conflictos. Nos parece sumamente importante que se aplique la mediación”.

Por su parte, Cristina Fiore recordó que el 29 de mayo del 2019 la Cámara sancionó una ley de bullying que, “lamentablemente durmió el sueño de los justos y quedó en el Senado”.

Continuó diciendo: “Al mirar esta situación de discriminación, de xenofobia, de las críticas, a veces no se advierte que las palabras tienen el poder de sanar y a veces de matar el alma. Todo se resume en respeto, si hubiera respeto por el otro no serían necesarias este tipo de leyes”.

Finalizó el debate Jorgelina Juárez que aseguró: “Sabemos que los índices de bullying en nuestra provincia son muy altos, sabemos que se profundiza mucho más en el interior”. La diputada, además, remarcó la falta de gabinetes pedagógicos en instituciones primarias y secundarias.

El proyecto fue aprobado por unanimidad y pasó al Senado para su revisión.