En el norte, el campo es asaltado por golpes comando con armas "de alto calibre"
Fue hace unos días que, mediante una solicitada, las entidades de PROGRANO, FEDERSAL, APROJUY y la Sociedad Rural Salteña se declararon hartos de la inseguridad que viven los campos y los productores del norte provincial puntualmente, pidiendo a las autoridades acciones concretar para mitigar los robos, la inseguridad y las pérdidas.
En medio de las repercusiones del caso, el titular de PROGRANO Francisco Vidal amplió los detalles sobre las diferentes problemáticas que están atravesando los productores, aseverando que incluso hay golpes comandos con un alarmante uso de tecnología y armas de alto calibre para proceder con sus asaltos.
“Esto bien de hace tiempo, lo que desencadenó (el reclamo) fue que empezamos a tener una escalada importante en la violencia, con armas de altos calibres, utilizando desde celulares hasta tecnología que no es habitual en los robos comunes”, dijo Vidal en una charla con el medio FM Capital.
Asimismo indicó que los problemas son de distinta índole y por toda la provincia, con cuatrerismo en el sur, siendo el caso de Rosario de la Frontera, robos organizados por Las Lajitas, Anta y J.V. González, mientras que “en el norte, de Pichanal para arriba, hay golpes comando”, denunció.
En este punto enfatizó que los puso en alerta dicho modos operandi “con organizaciones, con interferencia de celulares, violencia, armamento de alta complejidad que no lo tiene ni la policía… esto se está yendo ya saben dónde”, lamentó Vidal quien consideró importante un acompañamiento de las autoridades en todos sus niveles y representaciones, mermando la burocracia en la tramitación de denuncias, el accionar de las Fiscalías, etc.
“Estamos convencidos que de aquí a 5 años, si no se hace algo, el norte de la provincia será como Rosario”
El titular de PROGRANO enumeró igualmente que hay empresas agropecuarias que han llegado a invertir hasta $50 millones en cuestiones de seguridad, contratando seguridad privada y hasta pagando adicionales a la misma Policía, aunque “hay productores chicos a los que les es más difícil” invertir tal cantidad para proteger sus campos.