El gobernador Gustavo Sáenz volvió a sentar a todo su gabinete para revisar cómo viene la gestión y marcar el rumbo de los próximos meses. El encargado de dar los detalles fue el ministro de Infraestructura, Sergio Camacho, quien aseguró que el mandatario "fijó y actualizó las prioridades de lo que será el trabajo del gabinete".

Cambios desde el lunes
Camacho adelantó que la nueva Ley de Ministerios ya empieza a ponerse en marcha y que "el próximo lunes asumirán algunos de los nuevos funcionarios que van a ser parte del gabinete".

El rediseño institucional incluye la formalización de la Jefatura de Gabinete, una pieza clave para coordinar políticas y ordenar la gestión diaria. La idea es agilizar decisiones y sostener un esquema más eficiente.

La economía provincial, bajo la lupa
El ministro también defendió la situación económica local y subrayó que "es una provincia previsible, predecible desde el punto de vista económico y eso es lo que nos sostiene". Marcó diferencias con otras jurisdicciones: "A diferencia de otras provincias que tienen inconvenientes con el pago de sueldo, Salta tiene un cronograma fijado, con reuniones paritarias y vamos a tener desembolsos cada quince días hasta enero en término de aguinaldo y bonos".

Para los salteños, esto implica previsibilidad de pagos en plena crisis nacional, un dato clave para empleados estatales y proveedores.

Pero la recaudación cae

Aun así, Camacho reconoció que el escenario no es del todo favorable: "la recaudación no para de caer, debemos ajustar y fijar prioridades". Esto anticipa un cierre de año con recortes y un ajuste más fino en obras y programas, algo que impactará en los municipios y en la planificación provincial.